La cirugía de reducción de senos es una de las operaciones estéticas más comúnmente elegidas por las mujeres. Esta cirugía es adecuada para cualquier persona adulta. La edad mínima aceptada para este procedimiento es de 18 años. El principal motivo de esta limitación es que el desarrollo de los senos en las mujeres continúa hasta los 18 años. Junto con el límite de edad, las personas que no tengan un bulto riesgoso en el área del pecho o ninguna afección que impida la cirugía son candidatas adecuadas para la reducción de senos.
Puede ser dado de alta un día después de la operación. Una semana después, puede volver a su rutina diaria y a su vida laboral.
Antes de la cirugía de reducción de senos, se aplica anestesia general al paciente. Como resultado, el paciente no experimenta dolor durante la operación. Después de la cirugía, los pacientes pueden ser dados de alta al día siguiente, dependiendo de la aprobación del médico y la solicitud del paciente. Viendo esto, no sería incorrecto afirmar que el paciente no enfrentará un proceso especialmente difícil después de la operación.
Después de la operación, pueden aparecer hinchazón e inflamación temporal. Estos problemas generalmente duran un máximo de 4 semanas. Sin embargo, el proceso completo de recuperación y la aparición de la forma deseada pueden tardar de 6 a 12 meses.
En una cirugía de reducción mamaria, se requieren líneas de incisión para eliminar el exceso de tejido en el pecho. Por lo tanto, es de esperar que, al igual que en todas las cirugías, queden algunas cicatrices después de la operación de reducción mamaria. Estas cicatrices son más visibles en las primeras etapas después de la cirugía. Con el tiempo, dependiendo de la capacidad de curación de la piel, se desvanecen y su visibilidad disminuye. Al cabo de un año, las cicatrices se vuelven apenas notorias.
La duración de la operación puede variar entre 2 y 3 horas. Se aplica anestesia general. Después de la operación, es necesario permanecer bajo observación durante 1 día.
La cirugía de reducción mamaria se conoce médicamente como mamoplastia de reducción. Estos procedimientos suelen elegirse debido a problemas de salud o preocupaciones estéticas causadas por senos excesivamente grandes o caídos.
Para prevenir problemas médicos como dolores de espalda y hombros, llagas y infecciones debajo de los senos, se puede recurrir a un procedimiento quirúrgico. Además, esta operación también puede realizarse para levantar senos caídos después de la lactancia o reducir la sensación de presión causada por los tirantes del sujetador.
La reducción mamaria ofrece una opción para resolver tanto problemas de salud como preocupaciones estéticas. Nuestra clínica ofrece estos procedimientos de manera profesional, brindando los resultados que desea.
La reducción mamaria se puede realizar no solo por motivos estéticos, sino también por razones médicas. Hoy en día, el procedimiento se elige debido a los problemas estéticos y médicos causados por senos excesivamente grandes.
Ejemplos de preocupaciones estéticas incluyen la caída de los senos, la falta de simetría en la forma y las dificultades para encontrar ropa adecuada. Médicamente, esta operación puede ayudar a resolver los siguientes problemas:
El tamaño de los senos puede verse influido por varios factores como el estilo de vida, la genética, los cambios hormonales y la edad, lo que puede llevar a un aumento en su tamaño o a un cambio en su forma.
La reducción mamaria tiene como objetivo lograr senos simétricos, de tamaño igual y con la menor cantidad de cicatrices posible. De este modo, se pretende que los pacientes no solo estén estéticamente satisfechos, sino también libres de problemas médicos. Nuestra clínica realiza estos procedimientos de manera cuidadosa y conforme a los objetivos de cada paciente.
La cirugía de reducción mamaria generalmente se realiza después de que se ha completado el desarrollo físico, es decir, en personas de 20 años en adelante. El procedimiento consiste en eliminar el exceso de grasa en los senos y en la piel.
Además de los cambios hormonales, es importante que el desarrollo físico esté completo para que la cirugía se realice de manera segura y efectiva. La reducción mamaria se realiza generalmente bajo anestesia general. Dependiendo del tamaño de los senos, la operación puede durar entre 2,5 y 4 horas.
Entre las técnicas utilizadas durante la operación se encuentran el corte tipo «paleta de helado» y el corte en forma de T invertida. El corte tipo «paleta de helado» es un corte circular alrededor de la aureola, lo que permite elevarla si es necesario. El corte en forma de T invertida se realiza en la parte inferior del seno. En ambas técnicas, se elimina el exceso de tejido mamario y piel para completar la operación.
Después de una cirugía de reducción mamaria con láser, se recomienda que el paciente pase un día en el hospital. Tras la extracción de los drenajes, podrá descansar en casa y regresar a su vida diaria después de una semana. Sin embargo, después de la operación, puede experimentar una leve incomodidad durante 6 a 12 meses.
Es bastante común que queden cicatrices después de una reducción mamaria. Sin embargo, estas cicatrices pueden variar dependiendo del tipo de operación. En las operaciones tipo «paleta de helado», las cicatrices suelen ser menos visibles, ya que el corte es más pequeño y generalmente se ubica alrededor de la aureola. Por lo tanto, la diferencia entre la aureola y la piel casi no se nota.
En las operaciones tipo T invertida, las cicatrices pueden ser más visibles. Además de los cortes que se hacen desde la aureola hacia abajo, también puede ser visible la línea horizontal en el pliegue debajo del seno. Sin embargo, con el tiempo, estas cicatrices se suavizan y se vuelven menos visibles, adaptándose al color de la piel. El tamaño y la forma de las cicatrices dependen de la estructura del tejido mamario y la piel, los detalles de la operación y las técnicas utilizadas por el cirujano.
A pesar de la presencia de cicatrices, la mayoría de los pacientes están satisfechos con el resultado estético de la operación. Las cicatrices generalmente se consideran insignificantes en comparación con el alivio físico y emocional proporcionado por la cirugía.
Para que el proceso de recuperación tras una cirugía de reducción mamaria con láser sea eficiente, se deben tomar ciertas precauciones. Descansar y relajarse durante los primeros días puede acelerar el bienestar y la recuperación. Tomar regularmente los antibióticos y analgésicos prescritos por su médico apoyará el proceso de curación y reducirá el riesgo de infecciones.
El uso de un sujetador deportivo adecuado proporcionará soporte al tejido mamario, reducirá el dolor y ayudará a darle forma a los senos. Determinar los días para los cambios de vendaje reducirá el riesgo de infecciones en el área de la operación y apoyará la curación del tejido.
Otro aspecto importante después de la cirugía es evitar levantar objetos pesados. Durante unas cuatro semanas, se debe evitar levantar pesos y realizar movimientos exigentes para respetar el proceso de curación del tejido mamario.
Es normal que haya hinchazón y edema en el tejido mamario después de la reducción mamaria. Este proceso disminuirá en unas pocas semanas, y los senos alcanzarán su tamaño definitivo después de un año. Para acelerar la recuperación, se recomienda evitar el consumo de cigarrillos y alcohol. Estas sustancias pueden afectar negativamente la regeneración celular y aumentar la visibilidad de las cicatrices.
La cirugía de reducción mamaria es una opción adecuada para mujeres que desean aliviar los problemas físicos y psicológicos causados por senos grandes. Las personas que experimentan las siguientes situaciones suelen considerar este procedimiento:
La cirugía de reducción mamaria se lleva a cabo generalmente mediante cortes quirúrgicos y la eliminación de tejido mamario en exceso. Durante la operación, se elige una técnica en función del tamaño de los senos, la elasticidad de la piel, la distribución del tejido mamario y los resultados deseados. Las técnicas más utilizadas incluyen:
La cirugía de reducción mamaria generalmente es un procedimiento seguro, pero puede haber algunos riesgos y efectos secundarios. Estos incluyen infecciones, hemorragias, reacciones a la anestesia, apertura de suturas, pérdida de sensibilidad, cambios en la sensibilidad de la aureola, cicatrices visibles y asimetría. Sin embargo, estas complicaciones son poco frecuentes y pueden minimizarse bajo la supervisión de un cirujano experimentado.
Los resultados de la cirugía de reducción mamaria suelen ser positivos para los pacientes. Se informan comúnmente resultados favorables como la reducción de las molestias físicas, la mejora de la imagen corporal y el aumento de la autoestima. Sin embargo, el proceso de curación completo y la visualización de los resultados finales pueden tomar algunas semanas o meses. Las revisiones regulares y la adherencia a las recomendaciones del cirujano son cruciales para un proceso de recuperación exitoso.
El costo de la cirugía de reducción mamaria puede variar según las técnicas utilizadas, la experiencia del cirujano y las necesidades del paciente. En algunos casos, las compañías de seguros pueden cubrir este tipo de
Op. Dr. Burak PASİNLİOĞLU 2006 yılında Ankara Fen Lisesi, 2013 yılında Ankara Üniversitesi Tıp Fakültesi’nden mezun olmuştur. 2019 Yılında Gazi Üniversitesi Plastik Cerrahi Kliniği’ndeki asistanlık sürecini tamamlayarak; Plastik, Rekonstrüktif ve Estetik Cerrah ünvanını almıştır. 2020 Yılında Avrupa Plastik Cerrahi Denkliği’ni (EBOPRAS) almıştır. 2021 Yılından itibaren özel muayenehanesinde hastalarını kabul etmektedir.
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